La importancia de la formación continua para cumplir el SG-SST en Colombia

La seguridad y salud en el trabajo (SST) constituye un eje central en la gestión empresarial moderna. En Colombia, la implementación del Sistema de Gestión de Seguridad y Salud en el Trabajo (SG-SST) no se limita a la adopción de protocolos y documentos formales, sino que exige un compromiso permanente con la capacitación y formación de los trabajadores. La educación continua es, por tanto, una herramienta estratégica para garantizar el cumplimiento normativo, proteger la integridad de los empleados y fortalecer la productividad de las organizaciones.

La formación continua en el marco del SG-SST

El SG-SST, regulado principalmente por el Decreto 1072 de 2015 y complementado por la Resolución 0312 de 2019, obliga a las empresas a establecer programas de capacitación que promuevan la prevención de accidentes y enfermedades laborales. No se trata de un aspecto accesorio: la capacitación es uno de los estándares mínimos exigidos por la normativa, y constituye un requisito para demostrar la efectividad del sistema de gestión.

La formación continua implica un proceso dinámico y sistemático que actualiza y refuerza los conocimientos de los trabajadores en función de los riesgos específicos de su labor. Su objetivo es asegurar que cada colaborador pueda identificar peligros, aplicar medidas de control y responder de manera adecuada frente a situaciones de emergencia.

Razones que justifican la capacitación en SST

Existen múltiples motivos por los cuales la formación es esencial dentro del SG-SST:

  1. Cumplimiento legal: la legislación colombiana establece la capacitación como una obligación de los empleadores. La omisión de este deber puede derivar en sanciones económicas y en la suspensión de actividades.

  2. Prevención de riesgos: los cursos permiten reconocer los peligros asociados a cada actividad y aplicar protocolos de seguridad específicos.

  3. Reducción de la accidentalidad: un trabajador capacitado minimiza la probabilidad de incidentes, lo que se traduce en menores costos por incapacidades, indemnizaciones y daños materiales.

  4. Actualización permanente: las normas técnicas y los estándares de seguridad evolucionan constantemente. La capacitación asegura que las prácticas laborales se mantengan alineadas con los lineamientos más recientes.

  5. Cultura de prevención: la formación fortalece la conciencia colectiva sobre la importancia del autocuidado y la protección mutua en el entorno laboral.

Áreas críticas de capacitación en el SG-SST

Las necesidades de formación varían según la actividad económica de la empresa, pero existen áreas que resultan críticas en la mayoría de sectores productivos:

1. Trabajo en alturas

El trabajo en alturas es una de las principales causas de accidentalidad laboral en Colombia. La normativa exige que todo trabajador que realice actividades a más de 1,50 metros de altura reciba capacitación certificada en prevención de caídas, uso de sistemas de protección y rescate. La Resolución 4272 de 2021 regula los programas de formación en este campo, exigiendo entrenadores avalados y programas actualizados.

2. Seguridad eléctrica

Las actividades que involucran electricidad requieren formación específica en normas técnicas, como el Código Eléctrico Colombiano (NTC 2050), procedimientos de trabajo seguro y manejo de equipos de protección personal. La capacitación en este ámbito es esencial para prevenir electrocuciones, incendios y daños a las instalaciones.

3. Manejo de sustancias peligrosas

En industrias químicas, mineras, agrícolas o de manufactura, los trabajadores deben estar entrenados en almacenamiento seguro, manipulación, transporte y respuesta ante emergencias relacionadas con sustancias peligrosas. La capacitación incluye el uso de hojas de seguridad (MSDS) y protocolos de control ambiental.

4. Primeros auxilios y atención de emergencias

La ley exige que las empresas cuenten con brigadas de emergencia. Para ello, se debe capacitar a los trabajadores en primeros auxilios, control de incendios y evacuación. Esta formación permite una respuesta inmediata que puede salvar vidas y reducir el impacto de un accidente.

5. Riesgos psicosociales

La capacitación en manejo del estrés, prevención del acoso laboral y promoción de ambientes saludables fortalece la salud mental y contribuye al bienestar integral de los empleados, en concordancia con la Resolución 2646 de 2008.

Responsabilidades de empleadores y trabajadores

La formación continua en SST no recae únicamente en el empleador. La normativa colombiana establece obligaciones compartidas:

  • Empleadores: diseñar e implementar programas de capacitación pertinentes, garantizar recursos y evaluar la efectividad de la formación.

  • Trabajadores: asistir a las capacitaciones, aplicar los conocimientos adquiridos en su labor diaria y participar activamente en las actividades de prevención.

  • Administradoras de Riesgos Laborales (ARL): brindar asesoría, apoyar programas de formación y garantizar que los contenidos se ajusten a las normas vigentes.

Beneficios organizacionales de la capacitación

Más allá del cumplimiento normativo, la inversión en formación continua genera beneficios estratégicos para las empresas:

  • Disminución de costos operativos: la reducción de accidentes y enfermedades implica menores gastos en seguros, incapacidades y reemplazos.

  • Mayor productividad: trabajadores capacitados ejecutan sus tareas con eficiencia y confianza.

  • Clima laboral positivo: la capacitación transmite a los empleados que su seguridad es una prioridad, lo que incrementa el sentido de pertenencia y la motivación.

  • Mejora de la reputación corporativa: las organizaciones que cumplen con altos estándares de seguridad proyectan una imagen responsable y competitiva en el mercado.

Retos en la formación continua

La capacitación enfrenta diversos desafíos en el contexto colombiano:

  • Cobertura insuficiente en pymes: muchas pequeñas y medianas empresas carecen de recursos para contratar programas de formación especializados.

  • Actualización constante: la rápida evolución tecnológica exige que los contenidos se revisen y ajusten periódicamente.

  • Participación activa: algunos trabajadores perciben la capacitación como una carga adicional, lo que requiere estrategias pedagógicas que fomenten su interés y compromiso.

  • Monitoreo de impacto: no siempre se mide la efectividad real de la formación en la reducción de riesgos, lo que debilita el ciclo de mejora continua.

Conclusiones

La formación continua y la capacitación en seguridad y salud en el trabajo son pilares esenciales para el cumplimiento del SG-SST en Colombia. No basta con establecer políticas o protocolos escritos: es imprescindible garantizar que cada trabajador cuente con los conocimientos y competencias necesarios para proteger su vida y la de sus compañeros.

La inversión en educación en áreas como el trabajo en alturas, la seguridad eléctrica o la gestión de emergencias no solo responde a una exigencia legal, sino que se traduce en beneficios tangibles para las empresas: reducción de costos, incremento de la productividad y fortalecimiento de la cultura preventiva.

En última instancia, el éxito del SG-SST depende de que empleadores, trabajadores y entidades de apoyo asuman la formación continua como un compromiso permanente, capaz de transformar los lugares de trabajo en entornos seguros, saludables y sostenibles.

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